13 enero 2008

Nada de nada

vago echando la siesta
Este fin de semana fué desastroso.

Este sábado símplemente de dio pereza salir a correr, así que no salí a correr. Fuí directamente a lo del periódico y desayunar. Por pereza, que no quede: ni siquiera dí el paseo hasta el parque O'Donell.

En cuanto al domingo, tengo una llamada perdida de Rubén, que supongo que llamó para quedar con la bici, pero no la he visto hasta esta mañana. Así que ni bici ni correr. Nuevamente de frente al desayuno con periódico. Hoy, al menos, sí he dado el paseo largo.

Me veo obligado a abrir una nueva categoría en este blog: la de "vago". Vaya, veo que ya estaba creada. Creo que soy más vago de lo que pensaba.

Ultimamente me está dando la impresión de que mi mente y mi cuerpo andan algo peleados. Todas las noches mi mente decide que a la mañana siguiente salgo a correr y desayuno en casa. Todas las mañanas mi cuerpo sale a desayunar a la calle caminando despacito. No sé. Tendré que apuntarme a un curso de Tai-Chi, Yoga o cualquier filosofía de estas oriental que integren cuerpo y mente en una sola cosa. Y espero que sea el cuerpo el que se integre con la mente, porque como sea al revés...

2 comentarios:

Toupeira dijo...

Esa categoria (vago)esta más poblada de lo que te puedes imaginar. Todos lo somos.
Un descanso tampoco viene mal.
Se bueno.

somache dijo...

Nada, nada sigue igual,ya vendran tiempos mejores.
El hombre del tiempo nos ha engañado