22 noviembre 2009

Marchamalo

La semana pasada Chema trabajaba y a mí me dio pereza, así que no salimos. Pero hoy sí, hemos quedado los tres a las ocho en punto en la cafetería habitual. Tras el café de rigor salimos dirección Guadalajara.

La ida sin novedad, eso sí, como siempre, al llegar a la rotonda donde se decide si Guadalajara o Marchamalo, Rubén se equivocó y acabamos en Marchamalo. Panceta pa dentro.

La vuelta también si novedad, salvo que parece que el viento empezó a incordiar un poco.

El cuentakilómetros: 56.66 km, 20.9 km/h de media, 38.6 km/h de máxima, 842 calorías, 2810 km totales con la bici y 2 horas, 42 minutos de pedaleo.

08 noviembre 2009

A por los billetes de tren a Guadalajara

Esta mañana quedamos Rubén, Chema y yo a las ocho en la cafetería habitual. Les comenté de ir a Guadalajara, a sacar mis billetes de tren para las vacaciones de navidad. Alcalá no es capital de provincia, así que sólo abren las taquillas de largo recorrido por las mañanas en días laborables. Las agencias cobran un "huevo" por los billetes (6 euros por billete las agencias del Corte Inglés, o sea 48 € por la gestión por cuatro billetes de ida y vuelta). Pensé que Guadalajara, al ser capital de provincia y parar los trenes de largo recorrido tendría un horario más generoso.

La ida bien, sin problemas, El viento apenas se notaba y daba de lado algo por la espalda. Eso sí, llegando a Guadalajara, cogimos el camino habitual en el que la puerta de reja que han puesto no hace mucho estaba abierta. Y allí nos perdimos, por el otro lado estaba cerrada y estuvimos dando vueltas Chema y yo hasta que encontramos la forma de salir sin volver atrás. Rubén se había separado de nosotros en un camino y a base de escalar con la bici pasó y llegó antes a la estación de Guadalajara.

En Guadalajara la taquillera de cercanias estaba aburrida, poca gente viaja en tren un domingo a esas horas de la mañana, pero la ventanilla de largo recorrido cerrada. En Gudalajara como en Alcalá, sólo abren dias laborables por la mañana. Los billetes por internet imposible, llevo dos días mirando y da igual qué día mire, dice que no ha billetes (por decir, dice que no hay trenes). No sé, creo que RENFE debe mejorar mucho todavía.

En Guadalajara nuestro montado de bacon y café con leche. Luego, la vuelta, bastante dura. Ese viento que apenas se notaba y que venía algo de espaladas, ahora sí que se notaba y venía de lado y algo de frente. Todo el camino dano pedales como locos y reventaditos llegamos a Alcalá.

Llegando a la desviación de los Santos, Rubén no subió, porque la subida con el viento a favor podía haberla hecho sin problemas, pero para la bajada y con el vendaval en contra, seguro que no solo debía dar pedales, sino que incluso en algún momento (los de menos pendiente) tendría que bajarse de la bici y empujar.

El cuentakilómetros: 55.86 km, 18.7 km/h de media, 46.3 km/h de máxima, 737 calorías, 2 h 58 minutos de pedaleo y un total de 2753 km con la bici.

07 noviembre 2009

Pues no estoy en forma

Esta mañana salí a correr sobre las ocho y cinco. Después de casi quince días desde la última salida, hice una carrera corta, de unos veinte minutos (unos cuatro kilómetros. Y decididamente no estoy en forma, una carrera tan corta me cansa, no acabo agotado, pero tampoco corro cómodo el último kilómetro. Definitivamente, tengo que inventar algo para quitarme la pereza de encima y salir a correr con más frecuencia.

Luego los estiramientos en el parque de los bomberos, desayunar y paseo hasta Reyes Católicos y Parque O'Donnell.

01 noviembre 2009

Daganzeta

Esta mañana quedamos los tres a las ocho en punto en la cafetería habitual. Tras nuestro café de constumbre, salimos en dirección Daganzeta (perdón, dirección Daganzo, a tomar panceta).

El camino sin novedad y bastante rápido. Salimos a las ocho y media y antes de las diez estabamos en Daganzo, en el bar "polvorilla". Eso sí, fue el camino de los "bulos". En la bajada hacia el Torote bajamos por un camino paralelo que no tiene piedras (mentira cochina, lo acaban de arar y ya no hay camino) y luego cruzamos, como habíamos visto el día anterior a otros ciclistas, el Torote sin bajarnos de la bici (mentira cochina también, nos bajamos como siempre y pasamos sobre la piedras).

Luego la vuelta, también sin novedad y muy rápida, salimos de Daganzo sobre las diez y media y a las once y media estabamos en Alcalá.

Del cuentakilómetros ni se sabe, porque en algún momento se debió poner a cero y según él hicimos 20 km, cuando Daganzo ida y vuelta son cerca de 40.